....Aportaciones urgentes a la teología de la historia...INDEX

Aportaciones urgentes a la teología de la historia_4

La máxima urgencia para la teología de nuestro tiempo radica, nos parece, en la tarea de fundamentar una interpretación teológica del sentido de la historia.
(Canals, El culto al Corazón de Cristo ante la problemática de hoy, CRISTIANDAD, enero 1970)

En los tiempos de fe más viva preocupaba hondamente la aparición del Anticristo; ahora casi ha desaparecido del cuadro de las preocupaciones humanas».
(R. Orlandis, SJ:
Advertencia previa, 1 de mayo de 1945)

Aportaciones urgentes a la teología de la historia_1

Aportaciones urgentes a la teología de la historia_2

Aportaciones urgentes a la teología de la historia_3

Aportaciones urgentes a la teología de la historia_5

 

¡Marana Ta!¡Señor, Ven! ¡Ven Señor Jesús! "Ven ya"

.Benedicto XVI testimonia en 2020 el avance del poder del Anticristo

La mentalidad y el estilo de vida del Anticristo colectivo
Benedicto XV diagnosticó en 2011:
«Está en marcha un cambio cultural, alimentado también por la globalización, por movimientos de pensamiento y por el relativismo imperante, un cambio que lleva a una mentalidad y a un estilo de vida que prescinden del Mensaje evangélico, como si Dios no existiese».
(Benedicto XVI, Mensaje para la Jornada Mundial de las Misiones 2011).

-----------------------------------

"La historia va hacia la humanidad unida en Cristo"
LO QUE APORTA LA IGLESIA: "Conformar la historia humana con el orden divino"

La mayor promesa del Sagrado Corazón de Jesús es la de su reinado por el amor misericordioso que nos tiene

El doble exkatejon en vano lleva espada

La segunda venida gloriosa y visible de Cristo

La extraordinaria efusión de gracia que iniciará Jesús, el Verbo hecho carne, con Su segunda venida

.Malentendidos sobre la Parusía ...

El malentendido sobre la duración de los tiempos de la última época

El malentendido sobre la visibilidad de Nuestro Señor Jesucristo en su segunda venida gloriosa

Está doblemente mal traducido el nº DS 3839 del Denzinger en las traducciones a las lenguas modernas. Por una parte porque lo que afirma que está condenado como milenarismo mitigado son profecías reveladas en múltiples pasajes de la Sagrada Escritura, proclamado en la oración litúrgica de la Iglesia y anunciado por el mismo Jesucristo Nuestro Señor en el Evangelio, que Él vendrá visiblemente a reinar [de manera obviamente no visible] en la tierra. Y por otra parte, dichas traducciones, dejan sin condenar la afirmación crasamente herética y absurda de que Jesucristo Nuestro Señor vendrá a reinar visiblemente. Esas traducciones erróneas no están promulgadas por la Santa Sede, que lo que ha promulgado es el texto original en latín sin traducir. Atribuir a la Iglesia dejar sin condenar una herejía es un error muy grave; y todavía es mucho peor el error de atribuir a la Iglesia condenar las palabras de las profecías reveladas en la Sagrada Escritura, condenar el contenido de la oración litúrgica de la propia Iglesia y condenar lo anunciado por Jesucristo Nuestro Señor. Esto último es en su materia un pecado contra el Espíritu Santo.

Lo decretado y publicado en AAS en 1944 está en latín. La traducción en la versión española y en las otras lenguas modernas del Denzinger DS nº3839, que no es lo decretado ni lo publicado, proscribe que se diga que Jesús vendrá visiblemente, como Él mismo prometió, en vez de proscribir que se enseñe que Él reinará visiblemente; y eso es como mínimo un enorme malentendido. Que Jesús, el Verbo hecho carne, ha anunciado que en su segunda venida gloriosa "le verán" es la Sagrada Escritura, es el Evangelio, y no milenarismo.

Las traducciones a las lenguas modernas del decreto promulgado y publicado en latín por la Santa Sede en 1944 sobre el milenarismo mitigado tienen dos graves carencias. Por una parte proscriben que se enseñe que Jesús, el Verbo hecho carne, vendrá visiblemente en su Parusía o segunda venida gloriosa, lo cual es incompatible con lo que dice Jesús en el Evangelio y proclaman muchas otras Sagradas Escrituras y la oración litúrgica de la Iglesia. Y por otra parte, dejan de proscribir que se enseñe que Jesús reinará visiblemente, lo cual no sólo no puede enseñarse con seguridad, sino que es herético, al decir de Canals y de Orlandis, y reduce a Jesús, el Verbo hecho carne, a un mero califa. Y estas dos graves deficiencias las atribuyen a la Iglesia, siendo así que son falsificaciones de la doctrina de la Iglesia, "haciendo pseudomilagros con el hipérbaton"; mediante el cual, para empezar, en el original en latín, dejan en la ambigüedad lo que en la Sagrada Escritura está muy claro; para posteriormente, mediante las traducciones, dar el cambiazo los que se oponen a que "reine en esta tierra" Jesús, el Verbo hecho carne. Pero al final no les servirá de nada. Él reinará de forma eficaz aunque no visible en todas las almas y en todas las naciones, eliminando para empezar el imperio anticristiano con el esplendor de su segunda venida gloriosa en gloria y majestad. Esas traducciones a las lenguas modernas, doblemente erróneas, aparecen en el número 3839 DS del Denzinger traducido a dichas lenguas y no han sido promulgadas por la Santa Sede. Lo publicado en ASS son los textos en latín, no erróneos, pero con la demasía de la ambigüedad mediante el hipérbaton.

Enseña Canals que es herético sostener que la presencia de Cristo en su reinado en la tierra es visible:

«El milenarismo carnal, condenado incluso bajo su forma mitigada, es herético si se entendiera que el Reino de Cristo en la tierra coincide con una presencia «visible» de Cristo reinando, no en cuerpo glorioso, sino en una «corporeidad visible empíricamente». (Francisco Canals, Mis recuerdos del padre Orlandis. Acerca de su "milenarismo", Cristiandad, Barcelona, núm. 815, 1999).

"El Padre Orlandis entendía que el milenarismo prohibido, incluso en su forma mitigada por el decreto del Santo Oficio de 21 de julio de 1944, hubiera podido ser condenado formalmente como herético. Porque el milenarismo propiamente dicho entendía la segunda venida y el Reino de Cristo en la tierra en la perspectiva de la «visibilidad» del Rey, es decir, interpretando la segunda venida como una vuelta triunfante del Señor a estar visiblemente presente en el mundo: no en cuerpo glorioso, como consta por las Sagradas Escrituras que estuvo en los días desde la resurrección a la ascensión a los cielos, sino con una corporeidad visible empíricamente, del mismo tipo que la que quiso tener desde su nacimiento a su muerte en la cruz.
Con esta «visibilidad» del Rey estaba conexa en el pensamiento de los antiguos milenaristas -«herederos del error judío» según San Jerónimo, y «que rechazaban el vino celeste y no querían ser sino agua secular», según San Ireneo-,
una comprensión del Reino en el horizonte terreno y mundano que llevó a los dirigentes del pueblo judío al desconocimiento de la salvación que traía a este mundo el Hijo de Dios encarnado.
Fco. Canals,
Mis recuerdos del padre Orlandis. Acerca de su milenarismo, CRISTIANDAD, mayo-junio de 1999.

Canals decía que NS JC, cuando venga en su Parusía o segunda venida, ya no se va, [no hay tres venidas, su segunda venida es a juzgar a los vivos y a los muertos, y juzgar es una de las potestades propias del oficio de rey; juzgar es reinar; durante un tiempo no determinado. El juicio final no es el instante final, sino el juicio de la época final, el juicio o reinado no es un instante, seguido de la instantánea muerte de todos y de la instantánea destrucción de todo].

 

Dos malentendidos superados por Canals

Se refiere el primero a lo que pensamos con las palabras «día del juicio» y cuando a este día del juicio de Dios le añadimos el calificativo de «último o final». Tendemos a pensar en un instante, la venida del Señor, la conflagración del mundo, la resurrección de los justos y de los pecadores, la salvación de aquéllos y la condenación de éstos y la no existencia de la historia humana.

Es ahora muy necesario abrir nuestra mente al mensaje contenido en las palabras de San Agustín:

«La Iglesia universal del Dios verdadero confiesa y profesa que Cristo ha de venir del cielo a juzgar a los vivos y a los muertos, y a esto le llamamos nosotros último día del divino juicio, esto es el tiempo último. Pues, por cuantos días se extienda este juicio es incierto: pero las escrituras santas usualmente ponen el término día en lugar de tiempo, como no ignora el que haya leído, por más ligeramente que lo haya hecho aquellas letras santas. Así pues cuando decimos día del juicio de Dios, añadimos último o novísimo, lo que indica que también ahora juzga y que desde el principio del tiempo juzgó» (43. San Agustín De Civitate Dei lib. XX, cap. 1, núm. 2).

De este tiempo último del Juicio de Dios, de su Advenimiento y de su Reino, cuya duración desconocemos, hemos de sentir según la palabra de Dios que en uno y otro Testamento nos habla. Es éste el segundo malentendido que nos obligará a remover la renovación de la escatología en que hemos entrado: en modo alguno la venida del Rey a la tierra, el descenso de la nueva Jerusalén, desde el cielo a la tierra, vendría a justificar una esperanza «mundana» y «terrenal». No se trata de que finjamos un Mesías en que pueda culminar el amor al mundo y la soberbia del hombre, sino de la gloria del Señor, que «en aquel día será ensalzado únicamente» y de la consumación y plenitud de la benevolencia y gracia salvadora de Dios.

(44. «Pues Yahveh-Sebaot tiene determinado un día, contra todo lo altanero y elevado... entonces se doblegará el orgullo humano y se humillará la altivez de los hombres y sólo Yahveh será ensalzado aquel día».
Isaías 2, 11-12, y 17).

La Ascensión y la Parusía visible y gloriosa de Jesús, el Verbo hecho carne.

La parusía en la predicación de san Pablo explicada por Benedicto XVI

La civilización del amor es el reinado social en la tierra del Sagrado Corazón de Jesucristo

El Anticristo, persona moral, y la anomía

Los precursores de Jesucristo en su primera venida y en su segunda venida

Efectos de la Parusía o segunda venida gloriosa de Nuestro Señor Jesucristo

El artículo Parusía de la Enciclopedia Espasa

-------------------

El milenarismo carnal, condenado incluso bajo su forma mitigada, es herético si se entendiera que el Reino de Cristo en la tierra coincide con una presencia «visible» de Cristo reinando, no en cuerpo glorioso, sino en una «corporeidad visible empíricamente».
(Francisco Canals, «Mis recuerdos del Padre Orlandis: acerca de su “milenarismo”», Cristiandad, Barcelona, núm. 815, 1999).

---------------------------------------

San Gregorio Magno (540-604):

"Pues el que se levante pueblo contra pueblo y el que su angustia se abata sobre los países, lo estamos viendo en nuestro tiempo con más profusión de lo que leemos en los libros. También sabéis con cuánta frecuencia hemos oído que en otras partes del mundo ha habido terremotos que han devastado innumerables ciudades. Sobre nosotros se abate peste sobre peste. Es cierto que todavía no vemos claramente signos en el sol, luna y estrellas, pero el hecho de que no estamos lejos de eso, podemos deducirlo del cambio de clima que ya experimentamos".

----------------------

La Parusía de Jesús, el Verbo hecho carne, Su segunda venida gloriosa a la vista de todos,
con la que al evidenciar Su existencia, eliminará el poder anticristiano que,
cada vez más, impone vivir como si Dios no existiera, y como si nosotros los hombres fuésemos el ser supremo, todos en un todo; pero cada uno, un infinitésimo del supuesto colectivo mundial monolítico, en nombre del cual, ese poder anticristiano nos ningunea crecientemente del todo.

La esperanza de la Iglesia, proclamada en el Concilio Vaticano II,
de la conversión de Israel al Mesías, a Jesús, el Verbo hecho carne,
y de la unidad católica mundial

La extraordinaria efusión de la Gracia Increada, el Espíritu Santo, que, de parte del Padre, derramará Jesús, el Verbo hecho carne, con Su segunda venida, en todos los corazones y en todas las naciones, con los judíos a la cabeza de los creyentes en el Mesías Jesús, el Verbo hecho carne

La devoción al Sagrado Corazón de Jesús es para encender la caridad en todos y que, inflamados de amor, caminemos según su Corazón agradándole a Dios
Así lo enseñó en 1864 el beato Pío IX, Papa, en el Breve de beatificación de Margarita María Alacoque y en la encíclica Quanta Cura que venía con el Syllabus

-------------

El sistema político que impera de hecho en España hace inútil la doctrina del mal menor
Ahora se trata de solemnizar lo que ya se practica desde la época de la jefatura de Aznar en el PP, la alternancia en el poder del PP y el PSOE, manteniendo y conservando los conservadores el paquete de la muerte, con los imprescindibles retoques de maquillaje. Esto hace inútil la doctrina del mal menor. Porque el sistema consiste en que, cuando el PP reemplaza en el poder al PSOE, aunque retoca el maquillaje, mantiene el mismo mal en un giro de 360 grados, y sobre todo porque el mal que se conserva no es menor, sino que son males mayores. Ante la carencia de alternativa para la vida en el sistema, sólo queda rechazar el sistema y atenerse a las consecuencias. Benedicto XVI nos dejó advertidos de esas consecuencias, la exclusión social, que hemos de asumir gozosamente según las enseñanzas y el ejemplo de Nuestro Señor Jesucristo.
LEER MÁS

Benedicto XVI testimonia en 2020 el avance del poder del Anticristo:
«La verdadera amenaza para la Iglesia reside en la dictadura mundial de ideologías aparentemente humanistas, cuya negación implica ser excluido del consenso social básico. Hace cien años, cualquiera habría considerado absurdo hablar de matrimonio homosexual. Hoy queda socialmente excomulgado quien se oponga a ello. Lo mismo vale para el aborto y para la fabricación de personas en el laboratorio. La sociedad moderna está formulando un credo anticristiano y castigará con la exclusión social a quien se resista a él. Es totalmente natural el temor a este poder espiritual del Anticristo, y se hace necesario realmente el auxilio de la oración de todo un episcopado y de toda la Iglesia mundial para resistirlo».
[Benedicto XVI en la entrevista final del libro de Peter Seewald: «Benedickt XVI. Ein Leben», «Benedicto XVI. Una Vida». Editorial Droemer-Knaur. 4.05.2020

Hay "una separación creciente entre la fe y la vida"
Benedicto XVI con los obispos norteamericanos el 16 de abril de 2008

Véase también: La dinámica del mal menor es una estructura de pecado..

El Anticristo, persona moral, y la anomía

..El misterio de iniquidad o de transgresión

Indulgencia Plenaria el domingo, 23 de julio de 2023, Día de los Ancianos

Francisco nombra Prefecto del Dicasterio para la Doctrina de la Fe [antiguo Santo Oficio de la Inquisición] a Monseñor Fernández, Arzobispo de La Plata; y le da nuevas directrices inquisitoriales

Contextualizar las palabras de Monseñor Fernández

La dinámica del mal menor es una estructura de pecado..

La dialéctica es el álgebra de la revolución

... ..Para que haya democracia y libertad, la ética debe regir la conducta política de los votantes y no sólo de los políticos

La retirada de la reforma de ley del aborto de Gallardón en 2

Así formulaba Ramón Orlandis, S. J., la tesis católica

"El ideal católico es la realización del Reinado de Cristo sobre la tierra, la aceptación voluntaria por las naciones de la Soberanía Social de Jesucristo, que todas las naciones acepten y acaten el magisterio de la Iglesia y disfruten de los bienes que en esta buena nueva se les ofrecen".

"Cuanto más dista el mundo de la plena realización de este ideal, cuanto mayores son las exigencias malaventuradas de la hipótesis, más necesario es conservar puro y vivo en la mente y en el corazón este ideal, y profesarlo públicamente".
(Ramón Orlandis, S. J.:
¿Somos pesimistas? Revista Cristiandad – Nº 73 - AÑO IV - 1 de abril de 1947, pág. 145).

Esto lleva consigo y presupone que todos los habitantes de la tierra aceptarán y acatarán voluntariamente el reinado del Sagrado Corazón de Jesús, el Verbo hecho carne. Porque, según explica san Agustín, "dos amores fundaron dos ciudades".

La Buena Noticia es que así va a suceder con toda seguridad:

Está anunciada, como una profecía incondicionada y absoluta, la implantación universal en todos los corazones y en todas las naciones del Reinado del Sagrado Corazón de Jesús, el Verbo hecho carne, y la previa eliminación del catastrófico sistema anticristiano actual, tras su próxima dominación total. Todavía no ha implantado Jesús el Reino de Dios en la tierra en su plenitud efectiva, pero lo implantará. En todos los corazones, sí, en todos. Y en todas las naciones, sí, en todas.

Se nos dice que en la situación de laicismo actual, son irrealizables las normas católicas. Pero, ¿cuesta mucho alimentar la esperanza recordando a menudo lo que enseña el Concilio Vaticano II en Nostra Aetate, 4, que con toda seguridad todos los pueblos creerán que Jesucristo es Dios y obrarán en consecuencia, y vivirán según Él?:

"La Iglesia, juntamente con los profetas y con el mismo Apóstol, espera el día, que sólo Dios conoce, en que todos los pueblos invocarán al Señor con voz unánime y le servirán hombro con hombro" (Nostra aetate, 4).

Lo que es proclamar con toda seguridad la confesionalidad de todos los pueblos y que obrarán en consecuencia en el futuro. O lo que es lo mismo, proclamar la esperanza cierta de la unidad católica del mundo.

Sí, cuesta mucho: no se menciona esto nunca. Y tenemos hambre.

 

"Ya has venido, Señor. Estamos seguros de tu presencia entre nosotros. Pero, ¡ven de manera definitiva!". "¡Ven, Jesús! ¡Ven y transforma el mundo! ¡Ven ya, hoy, y que triunfe la paz!"
(Benedicto XVI, 23.08.2006, Audiencia general)

La Parusía de Jesús, el Verbo hecho carne, Su segunda venida gloriosa a la vista de todos,
con la que al evidenciar su existencia, eliminará el poder anticristiano que,
cada vez más, impone vivir como si Dios no existiera, y como si nosotros los hombres fuésemos el ser supremo, todos en un todo, pero cada uno, un infinitésimo del supuesto colectivo mundial monolítico, en nombre del cual, ese poder anticristiano nos ningunea crecientemente del todo.

La extraordinaria efusión de la Gracia Increada, el Espíritu Santo, que, de parte del Padre, derramará Jesús, el Verbo hecho carne, con Su segunda venida, en todos los corazones y en todas las naciones, con los judíos a la cabeza de los creyentes en el Mesías Jesús, el Verbo hecho carne

La esperanza de la Iglesia, proclamada en el Concilio Vaticano II,
de la conversión de Israel al Mesías, a Jesús, el Verbo hecho carne,
y de la unidad católica mundial

La caña cascada no la quebrará, la mecha vacilante no la apagará.
(Isaías 42, 3)

De derrota en derrota*, hasta la victoria final **
*nuestra; **de Jesús, el Verbo hecho carne

El misterio de iniquidad, anomía o transgresión.

La devoción al Sagrado Corazón y su crisis

El itinerario desde la Cristiandad al laicismo es un caso particular de la aplicación del mal menor como una estructura de pecado..22 11 2015 ....

..Jesucristo anunció el reino de Dios y efectivamente vino germinalmente el reino de Dios que es su Iglesia ...

.La civilización del amor es la plenitud intrahistórica del reinado social del Sagrado Corazón de Jesús, el Verbo hecho carne; es la civilización cristiana, la ciudad católica, la unidad católica mundial plenamente consecuente, la ciudad de Dios en la tierra:
El primero que introdujo esta expresión "Civilización del amor" fue el papa san Pablo VI en 1970, el que la desarrolló fue el papa san Juan Pablo II..

La proclamación de Cristo como rey fue el 11 de junio de 1899.

La tarjeta de visita de Jesucristo: soy rey

Las buenas noticias del Evangelio vienen también en el Apocalipsis

Aún no se ha cumplido la Buena Noticia, pero se cumplirá

La devoción al Sagrado Corazón de Cristo Rey......

La fiesta solemne del Sagrado Corazón de Jesús.

Catequesis de san Cirilo de Jerusalén

San Justino el Filósofo, Padre de la Iglesia y mártir (100-165)

Muéstranos a Jesús

La segunda venida gloriosa y visible de Cristo

Jesucristo quiere a toda costa reinar en cada alma porque ese es nuestro bien..

Jesús, el Verbo hecho carne, al evidenciar su existencia con su segunda venida gloriosa y visible, por el infinito amor misericordioso que nos tiene, eliminará el régimen anticristiano que, cada vez más, impone vivir como si Dios no existiera e iniciará una extraordinaria efusión de gracia, causando así, por ese amor todopoderoso que nos tiene, la plenitud de su reinado en todas las almas y en todas las naciones, que es nuestro bien reiteradamente prometido y anunciado
(LEER MÁS)

Jesús, el Verbo hecho carne, con su segunda venida, eliminará el régimen anticristiano e iniciará una extraordinaria efusión de gracia, causando así, por el infinito amor misericordioso que nos tiene, la plenitud de su reinado en todas las almas y en todas las naciones, como está reiteradamente prometido y profetizado

.La Parusía o segunda venida visible y gloriosa de Jesús, el Verbo hecho carne.
Jesús, el Verbo hecho carne, haciéndose ver en el esplendor de su segunda venida,
como cuerpo glorioso, no visible más que cuando Él quiere, al evidenciar Su existencia,
por el infinito amor misericordioso que nos tiene,
destruirá el poder anticristiano, que impone vivir como si Dios no existiera:
.

Malentendidos sobre la Parusía...

El malentendido sobre el cielo en la tierra tras la Parusía
No es lo mismo el cielo que el reino de Dios en la tierra tras la Parusía.
Difieren tanto, como la situación de los que viven en la tierra, difiere de la de quienes viven en el cielo. Y como difiere la Iglesia militante de la triunfante

.Malentendidos sobre la Parusía ...

El malentendido sobre el milenarismo aclarado por Canals

El malentendido sobre la duración de los tiempos de la última época

El malentendido sobre la visibilidad de Nuestro Señor Jesucristo en su segunda venida gloriosa

La Ascensión y la Parusía visible y gloriosa de Jesús, el Verbo hecho carne..

La parusía en la predicación de san Pablo explicada por Benedicto XVI

La civilización del amor es el reinado social plenamente efectivo en la tierra del Sagrado Corazón de Jesus, el Verbo hecho carne; es la civilización cristiana, la ciudad católica, la unidad católica mundial plenamente consecuente, la ciudad de Dios

San Juan Pablo II, Homilía en la Fiesta del Sagrado Corazón, 11.06.1999: "Sólo «aquellos que están arraigados y fundados en la caridad» (Ef 3,17) saben enfrentarse a la civilización de la muerte y construir sobre las ruinas del odio, del desprecio y de la ambición, una civilización que tenga su fuente en el Corazón del Salvador".
CRISTIANDAD. Barcelona. Números 817-818 • julio-agosto. Pág. 9 (145).

El misterio de iniquidad, anomía o transgresión

..El Anticristo, persona moral, y la anomía o transgresión ... .

La devoción al Sagrado Corazón y su crisis

Los precursores de Jesucristo en su primera venida y en su segunda venida

Efectos de la Parusía o segunda venida gloriosa de Nuestro Señor Jesucristo

El artículo Parusía de la Enciclopedia Espasa

---------------------------------------------------------